rase una vez un Proyecto muy bonito llamado "Una galleta, un cuento" organizado por Patricia, del blog Patty's Cake.
Esta fiesta temática sobre un cuento clásico la ganó el mes pasado Viví del blog"Hoy cocina Viví" por eso es la anfitriona de esta vez, y ha elegido para la ocasión "El gato con botas", en el que me estreno con gran ilusión.
INGREDIENTES:
-125 grs. de mantequilla (a temperatura ambiente)
-160 grs, de harina de repostería
-160 grs. de azúcar glass
-1 cucharadita de esencia de vainilla
-2 claras de huevo
-Una manga pastelera con boquilla lisa de 5 mm.
El hijo pequeño de un molinero fué el único de sus hermanos que recibió como herencia...
¡al
gato de la casa! lo que hizo que se sintiera muy decepcionado ¿y ahora
cómo se ganaría la vida, si no tenía el molino o por lo menos al burro?
Sorpresa!! el gato dominaba la "lengua" humana y le dijo que no se preocupara...tan sólo tenía que confiar en él y darle sus botas y una bolsa y pronto harían fortuna.
Poner en un bol la mantequilla y el azúcar. Batir hasta que quede una mezcla cremosa.
Ni
corto ni perezoso, allá que se fué a cazar; y como era muy listo al Rey
fué a visitar para ofrecérselo -con mucha labia- de parte de su
"señor, el marqués de Carabás"
Con paciencia, durante meses, siguió haciendo lo mismo hasta que se ganó su confianza.
2-Añadir la esencia de vainilla, mezclarlo bien.
3-Verter las claras una por una.
Cuando éste salió del río, ya ataviado con elegantes ropajes (que el rey mandó buscar) la princesa se enamoró perdidamente, pues el muchacho era dulce y estaba de buen ver. Y mientras se ofrecieron para llevarlo a su residencia...el gato se temió lo peor (pues nada tenían) y corrió con sus botas hasta encontrar el castillo del Ogro, que atemorizaba a los aldeanos.
4-Batir bien para que queden integradas.
De nuevo dió buen uso a esa lengüita que tenía...y puso a prueba la poca inteligencia del ogro, convenciéndolo para que se convirtiera primero en un león y luego en un ratón, que de un bocado se zampó!
5-Ir añadiendo la harina tamizada poco a poco...
Así pudieron presentarse como dueños de todas esas tierras y el castillo, haciendo ver al rey que disponían de muchas riquezas.
6-...mezclando con una cuchara de madera.
Por tanto, el Rey accedió a dar la mano de su hija al hasta ahora desconocido, Marqués de Carabás.
7-Precalentar el horno a 160º. Meter la masa en la manga pastelera y formar tiras de 6 cm. de largo sobre la bandeja forrada con papel de hornear, dejando espacio entre cada una (porque se expandirán)
8-Hornear unos 12 minutos aproximadamente. Estarán cuando los bordes de las galletas se pongan dorados.
Ah! y de postre...me dijo un pajarito que degustaron lenguas de gato en honor a su fiel compañero; pero no unas cualquiera, si no las preparadas por la repostera del reino, María E.mg je, je, reproduciendo eso sí...
9-Sacar y dejar que se enfrien un poco antes de retirarlas con una espátula y colocarlas sobre una rejilla.
10-Para presentarlo en la corona, cortar dos tiras de masa quebrada y ponerlas en el lateral de un molde engrasado. Pegarlas entre sí con la yemas sobrantes y pincelar también la masa. Pegarle el adorno que queramos, almendras en láminas, fruta confitada, etc... Hornear 15 minutos a 180º. Cuando se enfríe, desprender con cuidado.
El gato con botas es un cuento popular europeo, recopilado en 1697 por Charles Perrault en sus Cuentos de mamá ganso.
Así pudieron presentarse como dueños de todas esas tierras y el castillo, haciendo ver al rey que disponían de muchas riquezas.
6-...mezclando con una cuchara de madera.
Por tanto, el Rey accedió a dar la mano de su hija al hasta ahora desconocido, Marqués de Carabás.
7-Precalentar el horno a 160º. Meter la masa en la manga pastelera y formar tiras de 6 cm. de largo sobre la bandeja forrada con papel de hornear, dejando espacio entre cada una (porque se expandirán)
8-Hornear unos 12 minutos aproximadamente. Estarán cuando los bordes de las galletas se pongan dorados.
Poco después se casaron y fueron felices y comieron perdices.
9-Sacar y dejar que se enfrien un poco antes de retirarlas con una espátula y colocarlas sobre una rejilla.
¡¡La receta del gran Lauderée!! La confitería de lujo más famosa de París.
Su fundador, Louis Ernest-Lauderée curiosamente también fue un molinero,
para luego ir prosperando desde que cambiara la política por la repostería
y abriera en 1862 su primera tienda.
¿Sería que también heredó al gato?
¿O por el contario, en lugar de menospreciar su capacidad
confió en su propio ingenio y creatividad...?
El gato con botas es un cuento popular europeo, recopilado en 1697 por Charles Perrault en sus Cuentos de mamá ganso.
¿Te acordabas del cuento? ¿Vas a preparar la receta?
Anda díme...
¿O te comió la lengua el gato?Qué ganas tengo de ver aquí lo que han preparado mis compis!
Perdices no lo sé, pero unas cuantas de estas lenguas si me comía... ¡¡Qué ricas!! Para tomar con un chocolate bien calentito son ideales y son más sencillas de hacer de lo que pensaba.
ResponderEliminarUn post entrañable :)
Feliz domingo.
Qué bien explicado y qué bonita presentación con la corona
ResponderEliminarSon ideales para el cuento
María, me dejas extasiada, me gusta todo lo que haces, desde la receta, por supuestísimo, hasta la manera de ir desarrollando el post, te lo curras cantidad, con tus dotes de narradora, ya te veo como escritora de cuentos tan bonitos como el del gato con botas, ¿quién sabe?, quizás estamos ante una fabulosa creadora de historias maravillosas, porque todas tus historias seguro que llegas lejos.
ResponderEliminarBesos guapísima, y que sigas haciéndolo tan bonito.
Hoy me daba la gran merienda¡¡¡ qué buena pinta¡¡¡
ResponderEliminarEspero ponerme esta tarde a probar la receta a ver qué resulta¡¡
Ya te contaré¡¡ esto con el café vienés debe estar genial¡¡¡ un beso¡¡¡
Maria que bien te ha quedado, el post y la receta , esas lenguas tienen que estar de vicio
ResponderEliminarBesitos
Maria que bien te ha quedado, el post y la receta , esas lenguas tienen que estar de vicio
ResponderEliminarBesitos
Me comió la lengua el gato al ver tu divertida y creativa presentación. Para relamerse como los gatos tras probar tu rica receta. Sí que me acordaba de este bonito cuento y tu entrañable entrada me ha recordado a mi niñez.
ResponderEliminarBesos.
Requetericas las lenguas de gato y la corona chulisima. Feliz tarde!!!!
ResponderEliminar¡Que ricas! y que original post como, siempre son los tuyos. Esa corona de rey mago es también una pasada y puede ser estupenda para decorar el roscón de este año.
ResponderEliminarBesos querida María.
María (Tu probadora)
Qué reto más curioso y original, y con tu participación estelar, ni te digo!!!
ResponderEliminarNo recordaba muy bien el cuento, pero tu versión max-mix aderezada con lenguas de gato, ha sido muy amena y agradable, y es que eres única, para versionar y amasar a la vez :)
Qué de rechupete están las lenguas de gato, me encantan, y la corona qué chula!!! Y ya, que se me acaba de comer la lengua el gato, jejeje.
Qué acabes de pasar un feliz domingo!
Un beso!
Eres muy laboriosa, pues me parece que da mucho trabajo pero el resultado debe de ser muy bueno.
ResponderEliminarMe gusta mucho como presentas tus recetas.
Un abrazo.
que chula la corona!!! aix, me encanta como haces los posts!!! cada dia nos sorprendes!!
ResponderEliminary las galletas... tiene muy buena pinta!!
un besito!! y gracias por el truquito que me diste de los libros y el congelador jajaj
No recordábamos el cuento! Y no nos ha comido la lengua el gato!
ResponderEliminarLa lengua está salivando viendo la estupenda pinta que tienen las idems de gato! Jajaja!
Muchos besos
Que iniciativa tan bonita y original. Las lenguas de gato deben estar riquísimas !!!
ResponderEliminarUn beso María.
Que entrada más bonita y las lenguas de gato, seguro que riquísimas, yo me las comería al terminar de leer el cuento... Besos!!
ResponderEliminar¡¡Hola María!! Hace miles de años hice lenguas de gato, tendría sobre 12 años y las llevé a clase de francés porque nos habían dado la receta, escrita en francés, claro está y el profe nos dijo que si alguien quería hacerlas, que las llevara a clase. Y claro, ahí fui yo sin haber cocinado nada en mi vida, y así quedaron. ¡¡Duras como las piedras!! De sabor no estaban mal, pero primero había que romperte un diente para poder morderlas, ja, ja. ¡¡Ya podía haber tenido en aquella época las tuyas de repuesto!!
ResponderEliminarNo podías haber elegido nada mejor que las lenguas de gato para este cuento donde el gran protagonista es precisamente un gato. Y como gato listo, seguro que se hubiera comido todas las galletas y le hubiera encantado tu propuesta. Como a mi. Besitos.
Original tu post, y acompañadas con esas "plantillas" como la llamamos nosotros, mmmmm
ResponderEliminarBeso enorme
Que bien te han quedado!! perfectas en todos los sentidos!! Bs.
ResponderEliminarLa de veses que lei el cuento cuando era niña jajaja me ha encantado leerlo de nuevo y las lengua de gatos riquisimas besitos
ResponderEliminarHola María, estas lenguas están estupendas. Y qué bien que nos recordaras el cuento que era uno de mis favoritos de la infancia. Ah, y la corona chulísima. Besos.
ResponderEliminarEse cuento me gustaba mucho, me hacía gracia ver un gato que llevara botas, me ha encantado leerlo de nuevo para ser niña de repente unos minutos. Muchas veces digo que voy a comprar lenguas de gato y luego me olvido, veo que no parece muy complicado de hacer y se ven muy buenas, cambiaré lo de comprar por hacer.
ResponderEliminarUn besazo
A una de nosotras siempre le gustó ese cuento, será por su amor a los gatos y por el gusto por los cuentos menos cursis, jeje. Y las lenguas de gato...¡¡mmmmmm!! Esas sí que nos gustan a las dos y tu receta ya nos ha dejado con la boca haciendo aguas.
ResponderEliminarBesos a montones y feliz final de semana, María E.
J&Y
Hola María... Me extrañaría que hubiese alguien que no haya oído hablar del gato con botas
ResponderEliminarIba a decirte que el Marqués de Carabás y la hija del rey después de ser felices y comer perdices, debían probar tus lenguas... pero tú te me has adelantado ;-)
Me ha encantado la receta... y la entrada
Sigo sin poder suspenderte ;-)
Besos
Excelente como has presentado el cuento. Además de incluir partes del mismo nos has puesto un paso a paso para hacer las lenguas, toda una verdadera maravilla.
ResponderEliminarUn beso
Que pinta tienen esas lenguas... se me hace la boca agua.
ResponderEliminarQue maravilla de post tan divertido y original!
Me encanta la idea de la corona, queda preciosa.
Besos
De verdad que es estupenda la experiencia de leer este cuento saboreando una riquísimas Lenguas de Gato.
ResponderEliminarCuéntanos mas cuentos ... , ¡¡¡ anda di que sí !!!
Me ha encantado la receta, y me ha encantado el cuento, que recuerdos... :)
ResponderEliminarBesos!
Son unas pastas muy ricas para ilustrar un cuento inteligente como todos los clásicos con su mensaje subliminal. La corona me ha gustado un montón y lo rica que debe estar al igual que las lenguas de gato con un café humeante mientras leo y releo ese cuento una y otra vez.
ResponderEliminarbss
Me ha encantado tu forma de presentar la receta intercalandola con la narración del cuento. Son deliciosas y nosotros las tomamos a veces con paté pues nos encanta ese punto dulce/salado.
ResponderEliminarMe encanta su presentación. ;))
Besitos.
Hola María, que ricas lenguas y que bonito cuento, este reto es precioso y tu participación impresionante, como siempre amiga mía has hecho un post magnífico y que da gusto leer, claro que daría más gusto comerse esas lenguas de gato que se me antojan deliciosas.
ResponderEliminarUn besito y feliz semana guapísima.
Increíble María!! He tenido que retroceder para ver las imágenes de la receta porque leyendo el cuento se me han pasado todas jajjajja. Eres única contando historias y haciendo esta maravilla de lenguas que me comería en un santiamén jajjja. Un beso guapa!!
ResponderEliminarMe ha encantado leer de nuevo el cuento del Gato con botas. Te ha quedado muy bien relacionado el cuento con las imágenes que has ido enseñando del mismo. Y las lenguas de gato me gustan mucho, pero la corona también.
ResponderEliminarUn beso
espera, espera, primero me cojo una lengua de gato, me pongo cafelito, me acomodo en mi butaca y me dispongo a disfrutar de tu entrada!! Ahora sí, me ha encantado todo!!!
ResponderEliminarSeguro, seguro, que después de las perdices se hincharon a comer lenguas de gato, pero no estoy tan segura de si tendrían tan buen aspecto y estarían tan ricas como las tuyas. Y esa corona le pertenece al gato, por ser tan espabilado ;)
ResponderEliminarQue buenos recuerdos infantiles volviendo a leer de tu mano el cuento, a la vez que nos metes entre fogones. Una combinación perfecta.
Bssssss
Una gran propuesta para una tarde lluviosa....galletas y cuentos.
ResponderEliminarReconozco que me gusta más la literatura que la repostería porque me he releído el cuento antes que la receta.
Puedo decir que el post de hoy está de dulce...maravillosamente integrado, las imágenes, la receta y ese cuento que nos transporta a nuestra niñez.
BESOS
P.D:ya que estoy por aquí veré algunas recetas para esta semana.
mmm que ricas esas lenguas de gato.... y el paso a paso que has hecho es genial, gracias por compartir. ¡Me las apunto!
ResponderEliminarUn beso,
http://elbauldelasdelicias.blogspot.com.es/
Estupendas galletitas. Yo también las he preparado para el cuento, y doy fe de que están buenísimas
ResponderEliminarGracias por el paso a paso y por esta forma tan original de contar el cuento. Tus lenguas de gato se ven esponjosas y seguro que están deliciosas.
ResponderEliminarUn placer visitarte!
ResponderEliminardecorando de corazón
Hemos coincidido tambien con estas lenguas de gato. Deliciosas y muy bonitas te han quedado. Enhorabuena guapaisima!!!
ResponderEliminarHemos coincidido tambien con estas lenguas de gato. Deliciosas y muy bonitas te han quedado. Enhorabuena guapaisima!!!
ResponderEliminarQué ricas las lenguas de gato!!! Y qué pinta estas que has hecho!!!
ResponderEliminarXOXO
Que buenas hace tanto que no las como!!besos
ResponderEliminarVienen genial para el cuento! no se me había ocurrido esta receta! :O
ResponderEliminarjajaja, ENHORABUENA MARÍA!! por esta entrada tan bonita.. las fotos genial, la receta perfecta, el cuento precioso (que por cierto no me acordaba muy bien de él... y tú nos lo has recordado, gracias) y tu desparpajo y gracia para contar las cosas... que siempre me gusta mucho. Un beso muy fuerte y sigue participando en este reto siempre que puedas!
ResponderEliminarMe encantan este tipo de galletas además son tan fáciles de hacer.
ResponderEliminarUn saludo :)
Que maravilla de post, una receta exquisita, un cuento encantador, da gusto pasar por tu blog...
ResponderEliminarBesos
Hola MAría! Hace tiempo que no me pasaba por aquí para comentarte, pero si he leído tus entradas eh jejeje, no tengo tiempo para naaaaada.
ResponderEliminarLas lenguas de gato me encantan, sobre todo mojadas en leche jeje. Te han quedado muy ricas.
Un besote!
Ah, y por cierto las flores del otro día extraordinarias!!
Que bien ha quedado Maria, eres toda una artista y esas lenguas deben estar estupendas. Felicidades.
ResponderEliminarBuenísimas galletitas y estupendas que te han quedado! Además, la intro me ha encantado, cómo ibas relatando el cuento a medida que vas explicando la elaboración, las fotografías del detalle..un post muy currao!! Un muy buen estreno en el reto!! Besotes!
ResponderEliminarMUCHAS gracias a tod@s!!!
ResponderEliminarMe alegra tanto que os haya gustado mi estreno...
...que me hacéis más feliz que una perdiz!(◉◡◉)
Besos ❛❥❛
que chuladaaa!! me encanta la idea y la receta!! besitos
ResponderEliminarMiauuuu, que ricas esas lenguas y esa corona te ha quedado digna de la reina de las galletas.
ResponderEliminarUn beso grande
María me has recordado el cuento y he sentido lo mismo que sentía cuando era pequeña y me lo contaban, o lo leía. Ya, desde entonces, he sido una gran lectora y he disfrutado enormemente con cada línea, viviéndolo, como si yo fuera uno de los personajes. De ahí que algunas personas que me conocían me decían "Alicia la fantástica", bueno a mí no me importaba, mejor que otra cosa, jajaja.
ResponderEliminarDe las lenguas te digo que te han salido de maravilla, ni el mejor repostero, que las he visto en sitios de renombre y no tienen nada que envidiar. Gracias por este paseo tan agradable. Besitos.
Merhabalar, ellerinize sağlık. Çok güzel görünüyor.
ResponderEliminarSaygılar.
Hola cielo, que disfrute de lengua de gatos me encanta, me quedo por tu cocina guapa eres genial.. Besos guapa!!!
ResponderEliminarNo sé que me ha gustado más si la corona o las lenguas,desde luego tienen que estar riquísimas.
ResponderEliminarNo me extraña que tengas ganas de ver tu publicación, seguro que es la mejor. Me ha encantado cómo has enfocado esta entrada. Yo no sabía este cuento y ahora me llevo además de esta historia, una receta deliciosa, con unas imágenes muy bonitas.
ResponderEliminarUn beso y feliz semana María
Ahhh!! La corona chulísima
Recuerdo que de niña era una fiesta cuando nos regalaban una cajita de lenguas de gato, mi madre la pobre no tenia ni puñetera idea de repostería, así que había que esperar a que alguien las trajera de regalo, jajaja. Me encantan, y el cuento era uno de mis preferidos! Te han quedado geniales.
ResponderEliminarUn besazo
Uy que original, extrañaba leer tus recetas te mando un abrazo y te me cuidas mucho
ResponderEliminarNo sólo me acuerdo del cuento sino que es uno de mis favoritos de toda la vida ¡y es que siempre he tenido debilidad por los lindos gatitos!
ResponderEliminarMe encanta la receta y cómo has montado la entrada ¡eres una artistaza!
¡Besos mil! ¡y hasta el próximo cuento!
Me ha encantado acompañarte en la cocina paso a paso mientras nos contabas el cuento, como las madres y abuelas en las cocinas antiguas, el centro del hogar.
ResponderEliminarLas pastas, una pinta deliciosa. Mis congratulaciones a la Repostera del Reino, se merece una carroza con birretes plateados, se lo comunícaré al Príncipe encantador ;)
Un beso
Mmmm que pintaza tienen, como ralemerse después de comerse unas cuantas jajajaja muy divertida la presentación María. Besos!!!
ResponderEliminarHola María. Siempre es una delicia leerte ya que haciéndolo consigues que uno vuelva a recordar la etapa, ya lejana, de la niñez jj. Casi no me acordaba del cuento, ahora ese tipo de lectura pocos niños la leen, eso sí móvil que no le falte y con eso se logra que ni lean ni sepan escribir. Estamos tan adelantados que se aburren con todo.
ResponderEliminarYo creo que no me aburriría comiendo estas lenguas de gato. Te han salido perfectas de forma y no dudo que deliciosas de sabor.
Me ha encantado la presentación que has hecho de la entrada. Eres una artista.
Un abrazo
Ja ja ja. No se qué me ha gustado más, si tus lenguas de gato con botas o el cuento! Una maravilla!
ResponderEliminarUn besito :)
María, que precioso reto y que maravillosas lenguas de gato!!!!!!!!!
ResponderEliminarY ese cuento y la taza... me has transportado a mi más tierna infancia en un segundo!!!!!
Qué bonitoooooo!!!!!!!
Yo tengo el de "La ratita presumida", que volvieron a editar y me faltó tiempo para comprarlo, jeee, jeeee
Cómo pasa el tiempo....
Un enooooorme y cariñoso abrazo :)
Oh, pero que rico es el cuento del gato con botas, y las lenguas de gato también!!!
ResponderEliminarBesitos guapa y que disfrutes de la semana.
Hola María!!!
ResponderEliminarSiempre me han encantado las lenguas de gato, y desde luego acompañadas del cuento del Gatito con botas, y un buen café con leche, me comía no una ni dos... sino unas cuantas más.
Besitos!!
Una de mis recetas pendientes lenguas de gato pero que ricaaas, te han quedado genial!!! Besitos de Fácil con Bela
ResponderEliminarHola María, unas galletas para ganar, además ambientadas en el cuento favorito de mi infancia que no me cansaba de escuchar una y otra vez. Ánimo campeona. Feliz semana. Bstes.
ResponderEliminarrEquEtE agusto te habrás quedado al empezar el cuento... esa E. es una preciosidad (y qué recuerdos me ha traído de nuestros comienzos bloggeriles, jijij!), y el post otra de tus maravillas!!
ResponderEliminarMe encanta la receta María, el texto y las fotografías!! Aisss, qué bonitos los cuentos de la niñez, las imágenes son tan entrañables, y la tacita qué cucada, vaya joyitas guardas! La presentación de diez, anudadas y con las coronitas, qué imaginación tienes guapa!
Un besito gordo!!
hola!, me encantan , sin chocolate y con chocolate, es que además me traen muchisimo recuerdos de mis abuelitos, que siempre tenian lenguas de gato. Te han quedado perfectas, se ven deliciosas, besos!!
ResponderEliminarEsas lenguas de gato te han quedado maravillosas, me gustan porque se pueden utilizar en diferentes composiciones dulces. Aunque no se si me gusta más el cuento o las lenguas de gato.
ResponderEliminarBesos, Carmina.
Esas lenguas de gato te han quedado maravillosas, me gustan porque se pueden utilizar en diferentes composiciones dulces. Aunque no se si me gusta más el cuento o las lenguas de gato.
ResponderEliminarBesos, Carmina.
María, nos has entretenido con la receta y el cuento formidabemente ;)
ResponderEliminarLas lenguas de gato te han quedado estupendas ¡Tan ricas que son!
Espero que te vaya muy bien en el reto porque creo que has sabido presentarnos galletas e historia de mil maravillas.
Un beso grande.
Maravillosas!! Qué ricas!! Y esa corona es preciosa!! Un fantástico post!!! Besotes, cielo!!!
ResponderEliminarMuchas gracias, Patricia!!
EliminarUn abrazo.